¿Qué papel está jugando la URV en el liderazgo de la Plataforma Hidrógeno Verde Catalunya Sud?

La URV, conjuntamente con la Diputación, está realizando la función de coordinar esfuerzos y estrategias entre los distintos agentes sociales y económicos del territorio.

¿Qué importancia concede al acuerdo estratégico con IREC, ICIQ, Eurecat y URV para el desarrollo de la investigación sobre hidrógeno verde?

Al tratarse de una nueva tecnología, el proceso de impulso e implantación necesita de etapas de investigación y de innovación que nuestro acuerdo de clúster científico-tecnológico nos garantiza.

¿Prevé que esta 'alianza' aportará buenos resultados?

De hecho, los miembros de esta alianza ya colaboramos con éxito en diversos proyectos y programas. Este acuerdo nos aporta unidad de acción para conseguir una mayor eficiencia en nuestras intervenciones de I+D+i.

¿Hasta qué punto va a ser determinante la coordinación público-privada en el éxito de un 'hub' en el sur de Catalunya?

Se trata nada menos que de pilotar una transición energética, y en cierta medida industrial, y las empresas privadas son parte esencial. Hablamos de puestos de trabajo que necesitan ayudas públicas imprescindibles en el periodo transitorio de cambio.

¿Qué respuesta han recibido de las grandes empresas a la iniciativa de esta plataforma? ¿Están ya en coordinación con ellas?

En el Valle del Hidrógeno Verde del Sur de Cataluña se han integrado empresas grandes y también pymes emprendedoras, hasta un total de casi un centenar. Aparte de compartir este espíritu de transición energética basada en las renovables, la gran mayoría han definido proyectos que la plataforma está relacionando e integrando.

¿Y de las Administraciones? ¿Habrá sintonía entre las prioridades de la Generalitat y del Estado?

Todos estamos remando en la misma dirección. Las Administraciones del territorio han respondido con convencimiento y motivación: Diputación, ayuntamientos, consejos comarcales... Esta posición del territorio nos ha proporcionado el respaldo de la Generalitat y también de los Ministerios de Transición Ecológica y de Industria. Hemos sabido visibilizar correctamente que se trata de un proyecto que acompaña a las empresas y diseña su movilidad sostenible.

¿Cómo ve la competencia Tarragona/Catalunya con otras regiones (País Vasco, por ejemplo) por el reparto de los fondos?

En esta ocasión pienso que Europa no se ha equivocado. Ha pensado que no habrá "Next generation" sin este plan intensivo repleto de necesarias "transiciones" que viene acompañado con un programa económico generoso que evitará que las oportunidades de un territorio limiten las de otros vecinos. Es justamente lo contrario, y el planeta nos lo está diciendo.

A su juicio, ¿cuáles van a ser los factores clave para la consolidación de esta línea estratégica de futuro?

Hemos de ser conscientes de que en algunos momentos nos hemos entretenido en generar discrepancias inoportunas. Hemos de inocular en el territorio el convencimiento de que esto no puede volver a ocurrir. Lo primero son acuerdos firmes en torno a necesidades objetivas y solo después, nunca antes, defender nuestros proyectos en Barcelona, Madrid o Bruselas. Pienso que esta será la clave del éxito.

¿Está la sociedad de Tarragona preparada para seguir pagando el peaje de la producción de energía, en este caso de hidrógeno verde (parques eólicos, eólica marina, etc.?

Yo pienso que ya todos estamos convencidos que necesitamos transitar hacia las renovables y abandonar los combustibles fósiles. Las malas prácticas anteriores en la gestión de la energía nos han llevado a esta posición 'preventiva' de "lo estamos haciendo como antes" y "nos destrozan el territorio y los beneficios se van fuera". La transición energética actual nos permitirá una generación mejor distribuida y un consumo de proximidad. Los Ayuntamientos y los ciudadanos nos debemos sentir actores de la producción de energía y partícipes de sus beneficios. Estamos hablando también de una transición social. Necesitamos pensar, hablar, decidir y ejecutar de manera participativa. Nos equivocaremos menos. Esto nos permitirá reducir las desigualdades económicas dentro de nuestro propio territorio, y proteger las fragilidades de todo tipo que se manifiestan actualmente. Nos toca hacer más formación ciudadana y más empoderamiento de la gente a través del conocimiento.

Los resultados de la Plataforma en estos meses son muy esperanzadores, ¿cómo ve el futuro a cinco o diez años?

Aún no hemos conseguido ninguna transformación física real. Los frutos no los veremos hasta conseguir la eliminación de algunas toneladas de CO2 mediante el binomio renovables/hidrogeno verde establecido en diferentes proyectos que surjan en nuestro territorio. Estos proyectos ayudarán a nuestra industria a realizar su necesaria transición, ayudarán a nuestro territorio a vertebrar por fin ese sistema de movilidad tan esperado -que además será sostenible-, y ayudarán también a la implantación de nuevas empresas asociadas a la cadena del hidrógeno. Ello permitirá redistribuir la riqueza y las oportunidades en todo el territorio de la Cataluña sur.