Medi ambient

Bioeconomía circular: una oportunidad y una necesidad para Cataluña

"Se trata de un modelo que replantea la opción de tirar, por la de reutilizar, así como reparar o reciclar los productos y sus materiales"

Valeria Ferreira Gregorio

Profesora de la Facultat d’Economia i Empresa. Universitat Rovira i Virgili.

Nuestra economía se basa en un modelo lineal en el cual se fabrica, se consume y luego se tira. Se utilizan grandes cantidades de recursos y energía, lo que a su vez genera una cantidad excesiva de residuos. Ante esta realidad, es necesario adoptar nuevos modelos de producción y consumo enfocados en la sostenibilidad.

En los últimos años, la economía circular y la bioeconomía han contribuido notablemente a cambiar la situación crítica de estos tiempos, enfrentando los diferentes retos sociales y medioambientales y enfocándose en un desarrollo mundial sostenible.

La economía circular propone un nuevo modelo cuyo objetivo es producir de forma más eficiente al consumir los recursos y así reducir mínimamente los desechos generados. Se trata de un modelo que replantea la opción de tirar, por la de reutilizar, así como reparar o reciclar los productos y sus materiales. Por otro lado, la bioeconomía se basa en la producción y utilización de recursos biológicos renovables y su conversión en alimentos, piensos, productos biológicos y bioenergía, generando nuevos modos de suministrar alimentos, productos y energía sin agotar los recursos de nuestro planeta.

Economía circular y bioeconomía

Aunque son similares, la bioeconomía es más que una economía circular. Sin embargo tienen un objetivo común: lograr un mundo más sostenible, eficiente en el uso de los recursos y con menor huella de carbono. Al unirlos, lo que hacemos es enfocarnos en utilizar materiales para la producción que son amigables con la naturaleza, renovables y sostenibles, y obteniendo mínimos desechos biológicos reciclables que se convertirán nuevamente en materia prima, mejorando la eficiencia de los recursos y reduciendo las emisiones de carbono.

Esto indica que la bioeconomía circular es el nuevo paradigma económico enfocado en la sostenibilidad que intenta concatenar la economía con el medioambiente y los objetivos sociales. En paralelo, esto permitiría generar nuevas oportunidades comerciales a las industrias, aumentar la competitividad, generar empleo, ahorrar costes y obtener mayores beneficios económicos.

Cataluña necesita una estrategia para cumplir con los objetivos de la ONU

La relevancia mundial de este tema ha generado que diferentes países hayan desarrollado estrategias enfocadas en ambos conceptos. La novedad surge en 2018, cuando la Comisión Europea presentó un plan de acción para desarrollar una bioeconomía sostenible y circular, demostrando que enfocarse en una bioeconomía circular es la mejor manera de reducir el impacto sobre el medio ambiente.

La experiencia local

Cataluña tiene un gran potencial para adentrarse en los retos de la bioeconomía circular. Ha sido pionera en impulsar políticas de sostenibilidad, y en el año 2015 aprobó la estrategia "Impuls a l´economia verda i a l´economia circular- Competitivitat-Eficiència-Innovació", al mismo tiempo que lo hizo Europa.

Según un estudio elaborado en 2017, por la agencia catalana ACCIÒ, en Cataluña existen 391 empresas que ofrecen soluciones de economía circular, que facturan más de cuatro millones de euros exclusivamente en este sector. Además, Cataluña también cuenta con un observatorio circular, en el que se publican casos exitosos y novedades en el tema.

En contraste, la atención a la bioeconomía es escasa, y aún más al enfoque de bioeconomía circular. Por ejemplo, si consideramos el sector químico, este ofrece la posibilidad de diversificar la materia prima y poder crear productos mediante la utilización de biomasa. La industria química podría generar riqueza adicional para Cataluña por valor de 270 millones de euros para 2020 si se adopta un enfoque de bioeconomía.

A pesar de este potencial, Cataluña aún no cuenta con una estrategia enfocada al desarrollo y evolución de la bioeconomía circular, la cual sería muy importante en la implementación de políticas y la transición hacia un país que acompañe los objetivos de desarrollo sostenible promovidos por las Naciones Unidas.