¿Ha encontrado la manera de tomarse con humor algo tan serio como la continuidad de una empresa familiar?

He encontrado a José Luís Martin, el padre de Quico El Progre y Quico Jubilata; el autor de viñetas que dan un toque de humor, para mí muy acertado, al reflexionar sobre los principales temas de las empresas en general, y de las familiares en particular, que conforman el contenido del libro. JL Martin fue durante muchos años empresario con la revista El Jueves, y actualmente hace chistes de opinión en La Vanguardia.

¿Cómo se gestó esta aventura tan atípica?

No nos conocíamos en absoluto. Yo era seguidor suyo, un follower, como se dice ahora. Utilizaba algunas imágenes suyas en presentaciones, conferencias y demás. Un día, igual que a Newton le cayó la manzana en la cabeza, se me ocurrió plantearle un libro en común. Era en pandemia, y nos conocimos por correo electrónico, pero le gustó la idea y aceptó enseguida.

Lleva ya cinco libros sobre empresa familiar, ¿por qué le interesa tanto el tema?

Porque la temática de la empresa familiar es la más excitante que hay, al menos con la ropa puesta. Yo nací en una familia empresaria, he sido empresario y tengo claro que la empresa familiar es la base del empleo, del PIB, y por lo tanto, de nuestro estado de bienestar.

¿Cuáles son las claves para crear empresa con visión de largo plazo?

Pasión por el proyecto, acierto en la definición del modelo de negocio, ejecución adaptativa, comunicación y planificación.

¿Ejecución adaptativa?

Sí, cuando planificas, el papel lo aguanta todo. Creo que fue Napoleón el que dijo algo así como que la estrategia se acaba cuando empieza la batalla. La realidad te exige una rápida adaptación al cambio sobre lo que habías previsto.

El cambio suele costar lo suyo en las grandes organizaciones de origen familiar.

Las inercias son más complicadas, como en un gran petrolero si lo comparas con un barco de vela ligera. Las empresas más grandes suelen tener más explicitada su estrategia, y suelen ser más lentas en cambiarla. En teoría, las pequeñas son más rápidas, con el inconveniente de que dan más tumbos.

¿Qué virtudes empresariales se deben tener en cuenta en la gestión del cambio de timón de la empresa?

El relevo es un momento crítico en toda empresa, más en las familiares debido a que la duración de los cargos suele ser mayor. Como todo buen empresario, los predecesores deben planificar con antelación el proceso de relevo en la propiedad, en el gobierno y en la dirección de la empresa. Además, como personas han de ser valientes, porque puede haber decisiones familiarmente difíciles; y generosos, para ser capaces de dar un paso al lado dejando espacio a los continuadores. Los continuadores pueden heredar el poder, pero la autoridad se la deben ganar demostrando su capacidad. 

¿Y los principales peligros para el salto generacional?

Los principales peligros del relevo generacional son el olvido de que el sustantivo es empresa, familiar el adjetivo: la confusión de propiedad y capacidad, pensar que el ADN garantiza la transmisión de la voluntad y capacidad empresariales. También la incomunicación, la desafección o desinterés por la empresa, la improvisación, y la soberbia de pensar que nada de lo anterior nos puede afectar.

No deben ser fáciles de detectar.

Los padres somos muy malos juzgadores de nuestros hijos, en la empresa y fuera. Mi niño siempre es el más guapo y mi nieto el más simpático. Se crea la ilusión de que el ADN garantiza una buena transmisión, y no siempre es así.

¿Qué aspectos considera absolutamente claves?

El conocimiento de los peligros, la comprensión del sistema familiar, el diagnóstico de las fortalezas y áreas de mejora de la empresa y de la familia, la toma de decisiones racional, la comprensión de los distintos intereses legítimos, la definición del modelo de relaciones entre la empresa y la familia y sus normas, la comunicación, la planificación y las estructuras de gobierno de la empresa y de la familia. Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, voy a hacer publicidad de mi libro 'Ángeles y demonios de la familia empresaria', en el que ayudo a reflexionar sobre estas cuestiones.

En nuestro territorio hay ejemplos interesantes como Borges o el Grupo Oliva... ¿Conoce algunos más?

Me vienen a la cabeza Goma Camps, Concentrats Costa, Balfegó o Indústries Percibe, entre otras.

Asegura que la empresa familiar ha mostrado su resiliencia en la pandemia, ¿cómo está su salud tras la crisis sanitaria?

Cada cliente me explica el mercado según le va. No se puede generalizar, el sector textil hogar y de la hostelería, por ejemplo, han tenido diferentes comportamientos. Además, depende de con qué paso ha cogido a la empresa; no es lo mismo con deuda que con caja. Y no es lo mismo la tienda de la esquina que la de una empresa familiar como Inditex. En general, las empresas familiares son más resilientes, sobre todo si saben incorporar la visión de las nuevas generaciones.

El escenario de recuperación no es el esperado: cortes en las cadenas de suministros, carestía de energía y materias primas, inflación, previsible subida de tipos... ¿resistirá también esta 'tormenta perfecta'?

Las empresas familiares tienen una visión a largo plazo y una capacidad de sacrificio que las hace más resistentes a las tormentas perfectas. Parafraseando a Viktor Frankl "cuando no podemos cambiar lo que ocurre, podemos decidir cuál es nuestra actitud", y la actitud de las empresas familiares es la de sobrevivir para continuar. Yo recomiendo a mis clientes que tengas una dirección 3D, con distancia para evitar que el árbol impida ver el bosque, desapego para dejar atrás todo lo necesario, y determinación para tomar y ejecutar las decisiones adecuadas.

Se vive un cambio de patrón en las prioridades vitales... ¿cómo afecta la 'gran renuncia' a la savia nueva de emprendedores?

Los emprendedores, -y todo empresario lo es en un inicio-, son capaces de ver oportunidades donde otros ven problemas. Ven el vaso medio lleno en lugar de medio vacío, o tal vez son capaces de ver combustible para una pila de hidrógeno en el agua. Las épocas de cambio son propicias para la aparición de nuevos visionarios que sustituirán a los incapaces de dejar de hacer las cosas como se han hecho siempre.

¿Cómo casa la innovación disruptiva, cada vez más acelerada y en boca de todos, con estos 'dinosaurios' que se remontan varias generaciones atrás?

Una de las diferencias entre una empresa familiar y una familia empresaria, es que en la primera la familia no es capaz de adaptarse a los cambios de paradigma; y en la segunda sí es capaz de reinventarse en el grado necesario para adaptarse a la nueva situación. Las familias empresarias son capaces de crear un clima en el que se apoya el emprendimiento, incluso fuera del negocio "de toda la vida". Tienen claro que el principal valor de los fundadores no es el negocio en sí, sino la capacidad de arriesgarse y comprometerse para emprender.