Bajo la dirección de la reusense Susana Prado, la tecnológica Inetum acaba de abrir nuevas oficinas en Tarragona con las que pretenden consolidar sus proyectos en la demarcación, además de crecer y tejer complicidades con el territorio. Impulsora de múltiples iniciativas para dar voz y romper barreras para las mujeres dentro del sector tecnológico, Prado será una de las ponentes de la jornada Woman Tech organizada por el Clúster TIC Catalunya Sud el próximo 17 de noviembre en Reus.
¿Cómo ve la situación actual de la mujer dentro del sector tecnológico?
Llevo más de diez años dando clase en la Rovira i Virgili y aunque los ratios de mujeres en las aulas se han incrementado, todavía nos encontramos con grupos mayoritariamente masculinos. Se estereotipa lo que es la informática y las ingenierías y no se toma conciencia de que desde este sector dispones de la oportunidad y capacidad de construir y de crear el futuro digital, y eso es apasionante. Hay estudios que demuestran que las niñas en primaria ya se autoexcluyen de determinados estudios o aspiraciones porqué no ven referentes y no se sienten identificadas. Hay que intentar evitar esta situación, generar vocaciones STEAM que promuevan sus ganas y motivación para formar parte de un sector lleno de posibilidades, de aprendizajes y de crecimiento continuo. Las empresas tecnológicas actualmente se encuentran limitadas por la falta talento, y cuando lo encontramos nos cuesta garantizar diversidad porque sigue estando fuertemente masculinizado. Por ese motivo todas las compañías TIC compartimos la sensibilidad, y colaboramos en iniciativas que fomenten la diversidad y el empoderamiento femenino. En la hoja de ruta de cualquier empresa del siglo XXI no pueden faltar este tipo de reflexiones y de acciones mitigadoras.
¿Qué la motiva a abanderar proyectos que buscan dar voz a las mujeres en el sector tech y mejorar su situación?
En mi caso la visibilidad llega cuando asumo la dirección general, después de años de mucho trabajo y de haber cosechado una carrera exitosa en la que he pasado por múltiples responsabilidades y proyectos. Sabiendo lo que cuesta promocionar y asumir cargos directivos y encontrarte en múltiples situaciones como la única mujer, me di cuenta, compartiendo reflexiones y vivencias con otras directivas, de la necesidad de apostar e impulsar proyectos que visibilizasen casos reales de éxito, mujeres destacadas y referentes en distintos sectores, que expliquen su experiencia y su valor y sirvan de mentoras a otras, generando así una red que suma. Pequeñas acciones que contribuyen a divulgar y a fortalecer el liderazgo y el empoderamiento femenino.
¿Qué aspectos cree que todavía hay que trabajar a fondo para avanzar en temas de igualdad en el sector tecnológico?
Hace falta un cambio cultural profundo. Actualmente ya se han detectado algunos algoritmos de IA programados por equipos masculinizados que tienen sesgos de género, inconscientes pero sesgos digitales que emulan el mundo físico. Son muchos años arrastrando estereotipos y realidades poco diversas. Romper esta realidad, cambiarla, es complicado, por eso es muy importante que se entienda el verdadero problema que genera la falta de diversidad y que tengamos la voluntad de cambiarlo. Desde Inetum, tanto a nivel corporativo como personal, somo muchos los que colaboramos en iniciativas yendo a los institutos y a las escuelas a explicar cómo la digitalización está inmersa en todas nuestras realidades y experiencias y que pueden desarrollarse profesionalmente en distintos sabores técnicos y funcionales... ¡Que desmitifiquen y entiendan que el futuro digital se está creando y necesitamos mujeres para tener ese punto de diversidad en la conceptualización de los programas y soluciones que nos vienen!
Premio Dona TIC en 2019 y ahora nominada en la categoría de 'Alta dirección' del ranking Top100 Women Leader. ¿Cómo lleva lucir el cartel de referente en el sector?
No lo pienso, la verdad. Recibir ese premio en 2019 representó un momento muy importante en mi carrera, pero no fui consciente hasta después de ganarlo. Es un reconocimiento a tu trabajo, a tu esfuerzo, a cómo has hecho crecer a tus equipos, a cómo has colaborado con los clientes, a tus compromisos con socios y colaboradores, a ese trabajo de sororidad con las mujeres. Cosas que has hecho de forma natural y que descubres que han tenido un impacto positivo en tu entorno, a veces desconocido, y eso te empuja a seguir avanzando en la misma dirección con más fuerza y ganas. Me siento una persona afortunada y si compartiendo mi experiencia, mi aprendizaje y mi entorno puedo ayudar a otras mujeres o jóvenes a crecer... sin ninguna duda lo haré. En el caso del Ranking Top100 Mujeres Líderes, estoy muy contenta de estar entre esas candidaturas, es un lujo y un orgullo poder optar a la lista, veremos el resultado final en los próximos meses. De todos modos, ya te adelanto, que el resultado no va a cambiar para nada mi día a día y mis compromisos actuales.
¿Qué supone para usted participar en la jornada Woman Tech organizada por el TIC Sud en Reus?
¡Me hace mucha ilusión y me da mucho respeto a la vez! La mayor parte de mi carrera la he hecho fuera de Tarragona, para mi Barcelona está muy cerca, pero para la gente de Barcelona, Tarragona está un poco más lejos. Por eso para mí uno de los momentos más ilusionantes de este año ha sido poder abrir finalmente las oficinas físicas de Inetum en Tarragona. Tengo un gran equipo aquí local, comprometido y super-motivado. Ahora entramos en el Clúster TIC Catalunya Sud y resulta muy gratificante para mí poder compartir nuestra experiencia y el positive digital flow de Inetum en casa.
¿Desde la perspectiva de una multinacional como Inetum, qué papel juega Tarragona como polo de atracción para el sector tecnológico?
Inetum cuenta con un equipo de 600 personas en Catalunya con una facturación cercana a los 64MEUR. Para nosotros la oficina de Tarragona es clave y está convirtiéndose en un referente dentro de la compañía. Estamos creciendo mucho con clientes y proyectos locales pero también la estamos proyectando internamente y proponiéndola como sede para albergar centros de excelencia dentro del grupo. No solo buscamos crecer en Tarragona, queremos ser un actor tecnológico comprometido con los retos locales con cercanía, con innovación y flexibilidad, velando por un impacto positivo en el territorio. Compartiendo éxitos. Tarragona se inició como un proyecto muy personal, pero está claro que no nos hemos equivocado, disponemos de un ecosistema digital muy rico y competente y a la vez sectores industriales muy potentes. Un caldo de cultivo que debe augurarnos muchos éxitos si lo aprovechamos con generosidad mirando hacia un futuro que posicione Tarragona como un referente digital.
En Inetum habéis hecho una clara apuesta por un método de trabajo que permite la máxima flexibilidad. ¿En qué consiste y que efectos percibís que tiene en los equipos?
La pandemia nos ha llevado a todos a disponer de teletrabajo, demostrando que no importa el lugar físico desde donde trabajes. En Inetum hemos apostado por nuestro modelo de trabajo WOW, que nace pensando en un empleado digital, facilitando el acceso remoto a todas las aplicaciones y herramientas. Nuestra experiencia ha sido realmente positiva, el modelo hibrido ha facilitado a nuestros profesionales flexibilizar horarios y darle una nueva visión a la presencialidad, que se convierte en una experiencia clave para la cohesión de los equipos, el proceso de aprendizaje y el networking interno y externo. Creo que esta visión y modelo es un factor clave que cambia la manera de gestionar y liderar equipos, compañías y culturas corporativas exitosas.
¿Mayor flexibilización de equipos y deslocalización pueden ayudar a resolver la falta de talento del sector TIC?
No puede ser de otra manera. Las nuevas generaciones vienen con otra mentalidad y visión de lo que es el trabajo. Tienes que adaptarte. Catalunya se está posicionando como un territorio muy innovador, da igual si es Barcelona o Tarragona, estamos todos compitiendo por el mismo talento. Tienes que intentar conectar con tus empleados de manera diferente y no puedes exigir determinadas cosas que las nuevas generaciones no valoran ni les atraen, sería ir contracorriente.
Una informática vocacional
Ingeniera informática y experta en digitalización, Susana Prado es una persona curiosa e inquieta. Escogió la informática de manera natural, ya en el instituto empezó a estudiar programación y después optó por la ingeniería en la URV; centro en el que ahora da clase de Dirección de Proyectos Informáticos. "Me gustaba la capacidad de crear, de enfrentarte a problemas y poder resolverlos utilizando la tecnología". Su carrera profesional empezó en empresas locales del territorio hasta que se cruzó en su camino la posibilidad de trabajar informatizando diferentes servicios del Hospital Joan XXIII de Tarragona, desde donde arrancó su trayectoria hacia la consultoría y los servicios y soluciones digitales. Una experiencia que la ha convertido en un referente en su campo y le ha abierto la puerta a múltiples proyectos de la mano de Inetum, tecnológica líder en Europa en servicios y soluciones digitales.