Un sector sostenible, competitivo y resiliente

Juan Antonio Labat - Director General de Feique

La industria química genera una importante actividad económica a través de su demanda de productos, tecnologías y servicios, tanto indirectos como inducidos, por lo que continúa siendo uno de los principales y más consolidados sectores industriales de España.

En 2023 alcanzó una cifra de negocios de 82.493 mill € acumulando un crecimiento del 42,1% desde 2015. No obstante, el ajuste de la demanda experimentado el pasado año le llevó a retroceder un 8,2%, por la negativa evolución de la inflación y el alto volumen de stocks acumulados debido a la pandemia y la posterior invasión de Ucrania. Esta cifra le sitúa como el 2º mayor de la economía española, solo por detrás de la alimentación y bebidas.

Asimismo, es el 2º exportador de la economía española (por CNAE), hasta los 59.603 mill €. Después de incrementos muy importantes en 2021 y 2022, la retracción de la demanda generó un retroceso del 11% en 2023. Sin embargo, la proyección internacional continúa siendo una de nuestras principales bazas competitivas, de hecho, el 72,3% de la cifra de negocios la realiza fuera de España.

En el ámbito del empleo, el sector químico alcanza los 233.000 asalariados directos, que llegan a 800.000 si contemplamos los empleos indirectos e inducidos dependientes de su actividad, es decir, el 5,5% de la población activa asalariada del sector privado de España. Además, se trata de empleo estable y de calidad con un 94% de contratos indefinidos y un salario superior a 39.900 €/año, un 57% más que el salario medio español. Asimismo, es uno de los sectores industriales con mayor presencia de mujeres, que ya representan el 44,4% del total.

En el capítulo de la Innovación, las empresas químicas lideran la inversión en esta área en el conjunto de la industria española, aglutinando el 24% del total hasta los 2.000 mill €. También encabeza la contratación de personal dedicado a I+D+I (investigadores y técnicos).

Esta apuesta por la innovación está plenamente vinculada con el compromiso del sector con la transición energética y la neutralidad climática con el objetivo claro de alcanzar su descarbonización completa antes de 2050. Y para ello, se estima que, a nivel europeo, requerirá de inversiones de un billón de euros. Esto conllevará la modificación de las operaciones de suministro y requerirá del desarrollo de nuevos procesos y tecnologías que permitan neutralizar sus emisiones de CO2.

La industria química abastece de productos y tecnologías al 98% de los sectores productivos y se encuentra en la base de innumerables cadenas de producción. Por ello, desarrolla continuamente nuevos procesos que demanden un menor consumo energético por unidad de producción, así como avances tecnológicos que permitan mejorar la eficiencia de los existentes. Desde 2005, el consumo energético del sector se ha reducido un 42,4%.

Asimismo, en cuanto a la neutralidad climática, el sector ha experimentado desde 2005 una reducción del 42% de sus emisiones de proceso, si bien será preciso avanzar en la captura y almacenamiento de CO2 (CAUC).

Estas tecnologías serán indispensables para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. De hecho, la Comisión y el Parlamento Europeo han admitido que no será posible alcanzar los objetivos de neutralidad de emisiones en 2050 sin las CAUC. Éstas, no solo son la única alternativa tecnológica para retirar el CO2 de la atmósfera por vía directa o indirecta, sino también para reducir emisiones en sectores con emisiones de proceso complejas de abatir o para proporcionar nuevas materias primas de origen renovable.

Por otra parte, el sector químico, más allá de su propio desempeño, será clave para lograr los objetivos de descarbonización para 2050 marcados por el Green Deal desarrollando tecnologías y procesos innovadores net-zero para otros sectores industriales. Sin duda, esta industria continúa demostrando ser más estratégica que nunca para garantizar el funcionamiento y desarrollo de nuestra sociedad actual y futura.