Repsol impulsa proyectos transformadores

La compañía intensifica sus inversiones para acelerar la descarbonización, la eficiencia energética y la circularidad

Redacció / Tarragona

El complejo industrial de Repsol en Tarragona está inmerso en un proceso de transformación para consolidarse como un polo multienergético que ponga el foco en las soluciones de sostenibilidad para los diferentes mercados. Grandes inversiones ya planificadas como el mayor electrolizador de España o la Ecoplanta, ambos actualmente en fase de revisión, dependen de que se configure "un marco regulatorio estable y previsible".

El electrolizador es un proyecto clave para impulsar el hidrógeno renovable y la descarbonización. El que Repsol pretende construir en Tarragona tendría una capacidad de 150 MW y sería el más grande de España, produciendo hidrógeno que se utilizaría como materia prima para producir combustibles renovables y otros productos descarbonizados. La inversión sería de 300 millones de euros (cofinanciados por la Comisión Europea a través de su programa Innovation Fund) y la generación de unos 2.000 puestos de trabajo. Permitiría suministrar hidrógeno renovable a varias empresas del polo petroquímico de Tarragona, contribuyendo a su descarbonización.

Por su parte, la Ecoplanta, que sería la primera instalación de la península ibérica capaz de transformar residuos sólidos urbanos no reciclables para producir nuevos materiales y biocombustibles avanzados. La planta tendrá capacidad para transformar más de 350.000 toneladas anuales de residuos para producir 240.000 toneladas de metanol que se podrán utilizar para fabricar combustibles y productos químicos de baja huella de carbono. El proyecto también tiene el apoyo del programa Innovation Fund de la Comisión Europea.

Otro ejemplo de inversión es una nueva planta para la fabricación de cables de alta y muy alta tensión con una inversión de 35 millones de euros. "Contar con instalaciones industriales de vanguardia refuerza la independencia energética, origina una importante actividad económica y es pieza indispensable para la generación de empleo", argumenta Javier Sancho, director del complejo industrial de Repsol en Tarragona. "Tenemos que ser capaces de generar productos con baja, nula e incluso negativa huella de carbono, basada en la innovación, la economía circular y en su apuesta por liderar la producción de combustibles renovables e hidrógeno renovable", resume Javier Sancho.

En relación a los mercados, y dentro de la tónica general del sector, desde la empresa explican que "desde finales de 2022 afrontamos una baja demanda debido a la situación económica de alta inflación y mayores tipos de interés que limitan la actividad económica y perjudican el consumo". Por otro lado, el volumen de las importaciones de regiones con menores costes energéticos y con acceso ventajoso a materias primas está aumentando, lo que resulta en una reducción en los márgenes de los diferentes productos.