La incidencia de la crisis económica como consecuencia de la pandemia del Covid-19 podría ser menor en el Camp de Tarragona que en la mayoría de las regiones de Catalunya, gracias al peso que tiene la industria química en su economía. Así lo asegura un estudio de la Cátedra de Economía Local y Regional de la Universitat Rovira i Virgili (URV).
El estudio ha calculado el Índice de Afectación Estructural de cada territorio tomando como punto de partida los sectores considerados esenciales en estado de alarma y que son, por tanto, los que se ven menos afectados por la parada económica. Entre ellos se incluye a la industria química. El estudio también analiza el peso del resto de sectores considerados menos esenciales en cada una de las comarcas y territorios de Catalunya
Y el hecho de que el Camp de Tarragona cuente con la presencia de un sector esencial como el químico, y que éste tenga un peso tan importante en su PIB, hace que sus perspectivas respecto a la crisis no sean tan negativas como en otras regiones. "El índice de la media de Catalunya sería 1. Las zonas que tienen un índice por encima de 1 tienen una dotación sectorial digamos que menos protegida, y las que están por debajo de 1 estarían más protegidas frente a la crisis", asegura el director de la Cátedra, Juan Antonio Duro.
Y el Camp de Tarragona efectivamente presenta un índice inferior a 1. En concreto, es de 0,87, lo que le sitúa como la tercera zona de Catalunya que menos afectada quedará por la crisis. "En el índice se tienen en cuenta todos los sectores que tienen un peso esencial en la economía de esa zona, y en el caso de Tarragona el hecho de que tenga un índice por debajo de 1 claramente es por la influencia de la química", afirma Juan Antonio Duro.
Por comarcas, para el Tarragonès también se prevé una afectación de la crisis económica inferior a la media de Catalunya. Se trata de una de las únicas once comarcas de Catalunya con un índice inferior a 1. En este caso, es de 0,80. Igual que para el global del Camp de Tarragona, el motivo es el peso que tiene en la comarca la industria química.
De todos modos, el director de la Cátedra de Economía Local y Regional aclara que un índice inferior a 1 no significa que en ese territorio no vaya a haber dificultades económicas, ni mucho menos: "Disponer de sectores esenciales con un peso importante en la economía da a ese territorio un cierto margen de protección, pero se trata sólo de un margen. En todos los territorios, y en todos los sectores, va a haber dificultades porque hay una crisis de demanda global", asegura.
Sectores esenciales
Los sectores que el estudio ha considerado esenciales y, por tanto, menos expuestos a la crisis, son el sector primario; la energía; las industrias agroalimentaria, farmacéutica, química y electrónica; el comercio, el transporte, los servicios de información y comunicaciones, los servicios financieros y los servicios públicos. Se ha determinado a partir de los datos del PIB sectorial del IDESCAT, combinados con los datos del Anuario de Economía Comarcal de BBVA Research.
El estudio ha determinado que las dos regiones de Catalunya que menos sufrirán los efectos de la crisis serán las Terres de l'Ebre y las comarcas de Ponent, con unos índices de 0,71 y 0,68 puntos, respectivamente. En cambio, en el Penedès, el territorio más afectado, la cifra ascendería a 1,16 puntos. "Esta menor afectación en el Ebre y en Ponent se debe principalmente al peso que en estos territorios tienen el sector primario y la industria de la agroalimentación", apunta Juan Antonio Duro.
Por comarcas, las más afectadas por la actual situación de pandemia serán la Vall d'Aran (1,38 puntos), la Cerdanya y el Baix Penedès, con 1,34 puntos ambas. En la otra cara de la moneda, las menos afectadas serán la Ribera d'Ebre (0,25 puntos) y la Segarra (0,55 puntos). Este menor impacto en la Ribera d'Ebre, el más bajo de toda Catalunya con una diferencia considerable, se explica principalmente por el gran peso que la producción energética tiene en la comarca.